En los tiempos que vivimos está muy de moda hablar con acrósticos y eso descoloca mucho, porque impide el proceso de entrada a la comprensión. Así que empecemos por la definición de qué es eso que todo el mundo habla, de SEO y posicionarse.
¿Qué es el SEO?
SEO son las siglas de Search Engine Optimization, es decir optimizar la ingeniería de búsqueda, aunque generalmente todo el mundo habla de posicionamiento por aquello de la economía del lenguaje.
Esa búsqueda de la posición alude a los buscadores, donde queremos estar en los primeros resultados cuando nos busquen los clientes o usuarios de nuestro servicio. Google es de sobra conocido que es el rey de los buscadores, aunque hay más. Debemos saber de antemano que los resultados son de cada una de las búsquedas. Por ejemplo, si tenemos una ebanistería y tenemos un tipo de mueble que solo fabricamos nosotros, es fácil que si buscamos ese mueble en Google salgamos nosotros pero salgamos mucho más atrás si nos buscan por ‘muebles’ porque ahí igual nos gana IKEA.
Conozcamos los buscadores
Los buscadores utilizan un algoritmo (es decir una ley automatizada aparentemente neutral)que en función de la relación entre los contenidos de la página web y la pregunta del usuario, trata de ordenar los resultados más relevantes.
¿Cómo hace esto?
Pues hay unos robots (spiders o arañas) que van pasando periódicamente por las webs indexando los contenidos, es decir tratando de entender de qué van son los contenidos. Por eso, además de escribir bien para los buscadores debemos escribir bien para los robots también.
Pero tampoco debemos asustarnos, en realidad si se hace bien, lo que vale para unos vale para los otros.
Básicamente, lo que nos interesa es que cada texto debe estar organizado:
- Organizar el texto es decir que distingamos los párrafos con etiquetas html (<h1>, <h2>,<h3>…). Estas etiquetas la mayoría de gestores de webs (como WordPress que es el que utilizamos aquí) ya directamente nos permiten elegirlas desde un «modo más humano» en forma de Título1, Título2, Título3… conviene que escribamos también con esa estructura.
- En relación con lo anterior, debemos jerarquizar la información. Eso además de que estéticamente pueda quedar mejor, porque le damos más tamaño al 1 que al 2, también nos sirve para jerarquizar la información. Es decir, la idea es la del árbol genealógico o el armario. Dentro de un armario de ropa interior podemos tener un lado para calcetines y otro para camisetas, y dentro de cada uno podríamos distinguirlos por colores. Pues en los textos sucede algo parecido, debemos pensar cuáles son los títulos principales y después organizar los subapartados. Además se aconseja que éstos no sean muy largos, por lo mismo de antes para que con un vistazo casi por encima se pudiese ir directamente al mensaje que más nos interesa.
- Escribir de lo general a lo particular. Sobre esto siempre hay debate porque son tan solo consejos, no normas. Pero en los tiempos que vivimos alguna personas no leen los textos enteros, por tanto conviene que leyendo el primer párrafo se queden con la idea importante. Los robots que hablábamos también funcionarán de manera parecida, ellos tienen que encontrar relación entre el título de esa sección y con el texto de ese contenido. Aunque algunas veces nos convendrá que no sea así, por ejemplo si queremos poner un título provocativo para llamar la atención. Por eso también es importante utilizar los énfasis y las negritas para resaltar los aspectos importantes.
En la siguiente píldora hablaremos de SEO contra SEM